Los pequeños comerciantes agrupados en la ANPEC, manifestaron su preocupación por el impacto que los hechos de violencia en Sinaloa están teniendo en los pequeños comercios, destacando que esta situación está generando un grave desabasto de productos básicos y esenciales. Según Cuauhtémoc Rivera, presidente de la ANPEC, muchos transportistas y proveedores temen ingresar al estado, lo que afecta directamente la disponibilidad de mercancías en los establecimientos y, en consecuencia, a las familias que dependen de estos negocios.
“La inseguridad y la violencia pueden generar desabasto, lo advertimos oportunamente. Por ello, solicitamos con urgencia medidas que fortalezcan la seguridad en carreteras, centros urbanos y comunidades rurales, garantizando el libre tránsito de mercancías y la protección de las personas involucradas en las cadenas de suministro”, expresó Rivera.
En una carta dirigida a las autoridades de Sinaloa, la ANPEC hizo un llamado para que se restablezca la seguridad en el estado, permitiendo a los pequeños comerciantes continuar sus actividades sin interrupciones. Subrayaron que esta temporada decembrina es crucial para la recuperación económica de los negocios, pero la falta de condiciones seguras amenaza con agravar aún más el problema de desabasto.
Finalmente, Rivera destacó que es esencial garantizar la seguridad para transportistas y proveedores, ya que su temor de operar en Sinaloa afecta gravemente no solo a los comercios, sino también a las comunidades que dependen de estos productos para satisfacer sus necesidades básicas.